Pussy Cake
La nueva propuesta de Matarile Teatro
Pussy Cake, un pastel de 3 guindas.
Matarile está en capilla, un nuevo espectáculo está listo para ver la luz tras su paso por las residencias artísticas en Artika, el teatro Príncipal de Santiago y la Fundacion Sgae.
En esta ocasión el dúo Valles – Patiño se convierte en un monográfico de Patiño, escoltado por una equipa al servicio de la memoria de Francesca Woodman.
75 minutos de intensidad Matarile.
Un espectáculo de setenta y cinco minutos que mantiene un fuerte ritmo desde el inicio, una importante presión sonora, con contundentes imágenes de video y un dispositivo móvil de iluminación creado para este montaje, que cuenta con tres potentes y entregadas intérpretes que ponen toda la carne en el asador para mantener el estilo de la compañía más vivo que nunca
Sobre el paisaje escénico al que podemos llamar SITIO, se encuentra la poética inquietante de la fotógrafa Francesca Woodman, transitando momentos de danza pura que recuerdan fotos de Francesca empujados por una potente y sofisticada música electrónica. El dispositivo de iluminación y vídeo diseñados a medida envuelven el cuerpo cuyo cuero refleja, igual que una bola de espejos, un universo. El cuerpo, que no es una declaración, y la luz, hibridan en un diálogo atravesado por múltiples significados, algo que se traduce en un juego de estética descarnada que conecta con el porno hecho en casa, que no doméstico.
Inicios
Patiño nos cuenta.
¿Cómo surge la idea de este espectáculo?
La idea “aparece” en marzo 2022, retomo las bases de un espectáculo no realizado propuesto hace 10 años sobre Francesca Woodman.
Un trabajo previo de selección de músicas e imágenes, imágenes que serán guía durante el proceso, conforman la superficie por la que se deslizará Pussy Cake en estos meses.
El proceso de creación es distinto al habitual de la compañía. Dividido en una docena de encuentros en distintas ciudades y espacios de creación. El equipo artístico se combina de diferentes formas para cada uno de estos encuentros: coreógrafas, bailarinas, actriz, iluminador y el director, presente en todos ellos.
En noviembre 2022 todo el equipo comienza el trabajo de manera conjunta, las intérpretes ven el trabajo de las otras partes por primera vez.
Los espacios de pausa han sido tan importantes como los encuentros de creación, es en esas pausas donde pienso que aparece PUSSY CAKE.
Iluminación.
Los que conocemos Matarile y su historia, sabemos que eres algo más que, el iluminador, pero también sabemos que eres la luz de Matarile, ¿Cómo se elabora ese espacio, que es un personaje más dentro de la pieza?
La iluminación se prueba y ensaya dentro de un espacio teatral, se monta el dispositivo de luz y se genera la base de la iluminación de PUSSY teniendo en cuenta las coreografías ya ensayadas y los vídeos que intervienen, se trabaja con la documentación grabada de las coreografías y las músicas, para ajustar los movimientos de lu
La Woodman
¿Qué deberíamos saber sobre Francesca Woodman para entender la pieza?
Está considerada como la precursora del autorretrato que hoy asumimos con la palabra Selfie
Francesca dice “Estaba inventando un lenguaje para que la gente viera las cosas cotidianas que yo también veo… y mostrarles algo diferente… Simplemente el otro lado.”
Saltó por una ventana de un loft en Manhattan el 19 de enero de 1981. Fue un punto y final para una vida y para una artista que marcaría un hito en el arte. Tenía 23 años
Un final trágico que terminaba con estas palabras: “Esta acción que preveo no tiene nada que ver con un melodrama. Yo era, ¿soy?, no única, pero sí especial
Francesca se ha quedado en una eterna juventud, suspendida por la muerte, en el aire diria yo como una figura que se siente viva por el interés que sigue despertando su obra, sus padres se han ido eclipsando como artistas.
No está muy claro si Woodman partía de una perspectiva feminista: Rosalind Krauss, su primera gran valedora, así interpretó su obra, pero ha habido quien ha desmentido que la cuestión política fuera esencial para ella, como Cindy Sherman: “Se utilizaba a sí misma de un modo orgánico, no para hacer una declaración”.
Sloan Rankin, colaboradora y amiga, declaró “Lo que hacía estaba por delante de su época. Si coges un catálogo de Urban Outfitters y colocas al lado una foto de Francesca, verás que la industria se ha adaptado a su forma de pensar”. Si en lugar de eso se dan una vuelta por Instagram, ya ni les contamos.
No puedes dejar pasar Pussy Cake por delante y no entrar
+ Música sonido + Vídeo